Japón creará nuevas políticas para impulsar la tasa de natalidad

El primer ministro de Japón, Fumio Kishida, declaró que la década del 2020 sería la última oportunidad para que Japón cree políticas para parar el descenso de la natalidad; ya que no se llega a actuar, podría cargar consigo consecuencias negativas para la economía del país.

Kishida explicó que su gobierno está preparando políticas que ayudarían a las poblaciones más jóvenes; como auxilio para el cuidado de los hijos, reducir los costos de la educación, y aumentar los salarios de trabajadores jóvenes. También se cree que animarán más a que las mujeres se inserten al mundo laboral y se acepte la inmersión de inmigrantes al país.

“El problema del descenso de la natalidad es una lucha contra el tiempo”, declaró Kishida. En sus palabras, los hombres tendrán que ayudar más a criar a sus hijos. Su gobierno querrá elevar la tasa de permisos de paternidad al 50% para el año fiscal 2025 y al 85% para el 2030. “El gobierno hará de la creación de una sociedad en la que los niños sean lo primero el objetivo común de sus políticas.”

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Una sociedad estancada

Japón llegó a registrar el año pasado el menor número de nacimientos hasta, en lo que lleva de registros. Por siete años, su sociedad ha andado envejeciendo muy rápidamente, sin la posibilidad de haber una nueva generación. Con una mayor falta de nacimientos, Japón se verá con una mano de obra más reducida en los siguientes años.

Kishida insiste en que ambos padres deberían encargarse del cuidado de sus hijos, en lugar de dejar todo a la mujer. Pensaría crear subsidios para ayudar a trabajadores a tiempo parcial que trabajen más horas sin hacer frente a una barrera fiscal. También se esperará que tanto hombres como mujeres se acojan al permiso parental tras el nacimiento de un hijo.

Las decisiones de Japón son necesarios, ya que su población envejece cada día más y gran parte de las arcas de la nación van hacia el cuidado del ciudadano mayor. En poco tiempo, Japón acabará siendo uno de los países más endeudados del mundo por mantener a su gente.

El gobierno mandó 4,8 billones de yenes (36.000 millones de dólares) del presupuesto fiscal de 2023 a nuevas agencias dedicadas al soporte de los niños y sus familias, según los datos del diario Nikkei.

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